Año 1924 La aceptación y Union
Don Casildo estaba atento a lo que le decía Doña Francisca, era muy importante escucharla, pues en sus palabras había la experiencia por haber tenido una relación años atrás. Cuando Doña Francisca terminó de hablar, Don Casildo le dijo: Si acaso nos hubiéramos conocido anteriormente créame que yo estuviera muy feliz y dichoso de ser el padre de dos hijas tan hermosas como usted. No tengo palabras más adecuadas para decirle que con mucho gusto acepto a sus hijas como mis hijas y le ayudo en su alimentación, educación y si Dios nos lo permite juntos saldremos adelante.